Con más de cuarenta años tiene un cuerpo perfecto

Hasta que la cuarentona rubia no se quitó toda la ropa quedándose completamente desnuda frente a mí, pensaba que me llevaría una gran desilusión ya que me costaba creer que una mujer de su edad tuviera semejante cuerpazo, así que en cuando la vi desnuda la polla se me puso como una piedra y comencé a follármela bien duro en todas las posturas.