Arreglando el ordenador de una amiga de la abuela

Lo malo de ser un manitas en temas informáticos y que tu abuela se enorgullezca de ello cada vez que pasea por el barrio es que tendrás que acudir a ayudar a alguna pobre anciana sin recibir nada a cambio. Bueno esto es lo que pensaba el chico cuando tuvo que ir a casa de una de las amigas de cartas del casal de ancianos de su abuela. Una abuelita en toda regla que decía tener problemas con la computadora pero la muy zorra en realidad buscaba otra cosa porque no llevaba bragas.