La vieja casera sólo quiere sexo como alquiler

Se sentía muy sola desde que hace un año murió su marido, y puso una de sus habitaciones en alquiler para tener compañía en el piso durante todo el año. Lo que menos le importaba era el dinero, e incluso al final le dejó la habitación gratis a un hombre que no podía pagarle porque estaba dispuesto a compensárselo follándosela cada semana.